Que bueno es poder contar con un Dios Todopoderoso, que es nuestro sanador. Justo en el momento en que iniciaba esta página, llegaron mis hijas más pequeñas, Grissel y Yissel, del colegio donde cursan segundo y cuarto de Básica. Yissel, que tiene 7 años, llegó con un fuerte dolor de garganta, que la hacía llorar. De inmediato, acudí a la oración, a Jehová Rafa, a través de su hijo Jesús, y clamé por su salud, confiando en sus promesas que son fieles y verdaderas desde Génesis hasta Apocalipsis, y como dice que El (Jesús) llevó nuestros dolores y enfermedades en la cruz del Calvario y que por sus llagas fuimos nosotros curados, le pedí que le quitara, no que le calmara, el dolor a mi hija, y el llanto cesó y el dolor se fue. Gloria a Dios!
Yissel es una niña que desde el vientre de su madre ha sido atacada por el enemigo de las almas, Satanás, porque Dios tiene grandes planes con ella. Pasados los siete meses de gestación su madre se cayó de frente sin ninguna justificación y la criatura se asustó mucho en el vientre, lo cual la dejó marcada con un soplo en el corazón. Pero, cuando nació, fruto de que su madre hizo una diabetes gestacional, se le formó un tapón de meconio en los intestinos que le impedía evacuar, lo que la mantenía llena y no comía, por lo que hubo que hacerle una cirugía para liberarla y salvarle la vida. Durante sus primeros meses fue muy enfermiza, hasta que Dios me hizo cambiarle el nombre por el de Ambar, del cual busqué el significado en la Internet y reúne las mismas características que identifican a mi hija, y me confirma que ciertamente Dios estaba en el asunto. En otra ocasión, su madre la llevó al médico porque tenía mucha fiebre y me llamó al trabajo que le habían detectado dengue, en el instante dije en mi mente "Dios mío, no puede ser, reprendo este dengue en el nombre de Jesús", y no pasaron 15 minutos, cuando mi esposa me volvió a llamar que le repitieron la prueba y milagrosamente los signos de dengue habían desaparecido, sin que los médicos pudieran explicárselo.
Hay otros testimonios que podría añadir sobre mi querida hija Yissel, pero ya les contaré en otra ocasión.
Que Dios les Bendiga,
Yissel es una niña que desde el vientre de su madre ha sido atacada por el enemigo de las almas, Satanás, porque Dios tiene grandes planes con ella. Pasados los siete meses de gestación su madre se cayó de frente sin ninguna justificación y la criatura se asustó mucho en el vientre, lo cual la dejó marcada con un soplo en el corazón. Pero, cuando nació, fruto de que su madre hizo una diabetes gestacional, se le formó un tapón de meconio en los intestinos que le impedía evacuar, lo que la mantenía llena y no comía, por lo que hubo que hacerle una cirugía para liberarla y salvarle la vida. Durante sus primeros meses fue muy enfermiza, hasta que Dios me hizo cambiarle el nombre por el de Ambar, del cual busqué el significado en la Internet y reúne las mismas características que identifican a mi hija, y me confirma que ciertamente Dios estaba en el asunto. En otra ocasión, su madre la llevó al médico porque tenía mucha fiebre y me llamó al trabajo que le habían detectado dengue, en el instante dije en mi mente "Dios mío, no puede ser, reprendo este dengue en el nombre de Jesús", y no pasaron 15 minutos, cuando mi esposa me volvió a llamar que le repitieron la prueba y milagrosamente los signos de dengue habían desaparecido, sin que los médicos pudieran explicárselo.
Hay otros testimonios que podría añadir sobre mi querida hija Yissel, pero ya les contaré en otra ocasión.
Que Dios les Bendiga,
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